La romántica y bella Lisboa, con sus calles adoquinadas, sus cuestas y sus miradores, es una ciudad perfecta para viajar duarnte este otoño, cuando la nostalgia se respira en sus calles y se sienten muy a dentro sus populares fados. Encima, durante los meses otoñales se llevan a cabo en la capital portuguesa varias iniciativas culturales-artísticas de nivel.
En primer lugar, hasta el 25 de enero de 2015, la Fundación Calouste Gulbenkian alberga la exposición “Una historia compartida. Tesoros de los Palacios Reales de España”, una excelente muestra de 141 obras de arte pertenecientes a la Casa Real Española, donde sobresallen piezas de Goya, El Greco, Andrea Vaccaro, Juan Pantoja de la Cruz, Bernard Van Orley y Manuel Pereira.
Desde la época de Isabel la Católica, a Isabel de Braganza, fundadora del Museo Nacional del Prado, la exposición aborda más de 350 años de la historia de España, centrándose en la relación entre las dos monarquías ibéricas.
Por otro lado, del 29 de noviembre al 12 de abril de 2015, el Museu Nacional de Arte Antiga acogre la exposición “FMR. La Colección Franco Maria Ricci”. Por primera ocasión, la colección de este diseñador, editor y bibliófilo, nacido en Parma (Italia) en 1937, sale fuera de su país para llegar a la capital portuguesa.
Así, este museo lisboeta exhibirá cerca de 100 obras de pintura y escultura, desde el siglo XVI hasta el siglo XX, par llevara al visitante a un viaje fascinante a través del arte del retrato.
Por último, si se desea completar una ruta cultural, los últimos sábados de cada mes, las visitas conocidas como “Do Museu ao Bairro da Madragoa” (Del Museo al Barrio de Madragoa). El Museo de las Comunicaciones organiza estas rutas en las que los visitantes pueden conocer el museo y las inmediaciones de su barrio histórico. La próxima cita tendrá lugar el 29 de noviembre, con salida desde el Museo de la Marioneta.
Foto vía Traveler