Lisboa acaba de inaugurar la ampliación de su Metro después de cinco años u de retraso por diferentes motivos, una obra en la cual se han invertido 210 millones de euros y con la que se ha logrado conectar, al fin, el aeropuerto con el centro de la capital lusa.
De este modo, se han abierto al público tres nuevas estaciones en la línea roja, que parte del barrio de Sao Sebastiao, zona neurálgica de la capital portuguesa, y que antes concluía en la parada de ferrocarril de Oriente.
Las obras han ampliado el recorrido del Metro de Lisboa en poco más de tres kilómetros desde Oriente, si bien se espera que cada mes haya un incremento superior a 400.000 pasajeros. Así, muchos lisboetas y turistas utilizarán esta nueva ampliación del Metro.